El dolor crónico es una condición que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se define como un dolor que dura más de seis meses y que puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de las personas que lo padecen siendo la segunda causa de incapacidad en el mundo y afectando a un 17% de la población española.
¿Dolor crónico o dolor agudo?
El dolor agudo es un tipo de dolor que se produce como respuesta a una lesión o enfermedad. Por lo general, es de corta duración y desaparece con el tratamiento de la causa que lo genera.
El dolor crónico, por el contrario, es un tipo de dolor que persiste más allá del tiempo de curación de la lesión o enfermedad que lo causó. Puede ser causado por una variedad de factores, incluyendo:
- Enfermedades crónicas, como la artritis, la fibromialgia o la diabetes.
- Lesiones, como las fracturas, los esguinces o las lesiones de espalda (cervicalgia, dorsalgia, lumbalgia).
- Factores psicológicos, como el estrés o la ansiedad.
El dolor es subjetivo, lo que significa que la experiencia y la percepción del dolor varían de una persona a otra. Puede describirse de diferentes maneras, desde punzante, ardiente o pulsante hasta sordo o constante. Además, el dolor no solo involucra una respuesta física, sino que también tiene una dimensión emocional, ya que puede causar ansiedad, depresión y estrés.
Afecciones que causan dolor crónico
Algunas de las enfermedades más comunes que pueden causar dolor crónico incluyen:
- Artritis: Es una enfermedad que afecta a las articulaciones y puede causar dolor, rigidez e inflamación.
- Fibromialgia: Es un trastorno que causa dolor generalizado, fatiga y problemas de sueño.
- Enfermedad de Crohn: Es una enfermedad inflamatoria intestinal que puede causar dolor abdominal, diarrea y pérdida de peso.
- Dolor de espalda: Es una de las causas más comunes de dolor crónico. Puede ser causado por lesiones, problemas de postura o enfermedades subyacentes.
- Dolor de cabeza: Es otro tipo de dolor común que puede ser causado por una variedad de factores, incluyendo la migraña, la tensión y la sinusitis.
Tratamiento multidisciplinar
El tratamiento del dolor crónico debe ser individualizado y debe tener en cuenta todos los aspectos de la condición, incluyendo el dolor físico, el impacto emocional y el impacto en la calidad de vida del paciente.
Por lo general, el tratamiento multidisciplinar es el más eficaz para el dolor crónico. Este enfoque implica la participación de un equipo de profesionales de la salud, incluyendo entre los más comunes:
- Médicos: Serán los encargados principalmente del tratamiento farmacológico ya que pueden recetar medicamentos para el dolor y tratar cualquier condición subyacente que pueda estar causando el dolor.
- Fisioterapeutas: Encargados en este caso de la terapia física ya que pueden ayudar a mejorar la función corporal y reducir el dolor.
- Psicólogos o terapeutas ocupacionales: Necesarios para el tratamiento a nivel emocional ya que pueden ayudar a las personas a manejar el dolor y el estrés asociado.
Los tratamientos multidisciplinares pueden incluir:
- Tratamiento farmacológico: Los medicamentos para el dolor pueden ayudar a reducir la intensidad del dolor. Los tipos de medicamentos utilizados para el dolor crónico incluyen analgésicos, antiinflamatorios y medicamentos para la depresión y la ansiedad.
- Terapia física: La terapia física puede ayudar a mejorar la fuerza, la flexibilidad y el rango de movimiento, lo que puede reducir el dolor y mejorar la función.
- Terapia ocupacional: La terapia ocupacional puede ayudar a las personas a aprender nuevas formas de realizar las actividades diarias, lo que puede reducir el estrés y el dolor.
- Terapia cognitiva-conductual: La terapia cognitiva-conductual puede ayudar a las personas a cambiar la forma en que piensan y se comportan en relación con el dolor, lo que puede ayudar a reducir la intensidad del dolor y mejorar la calidad de vida.
- Terapias complementarias: Esenciales también para complementar algunos de los anteriores y enfocados al tratamiento especifico de los síntomas que padece el paciente más allá de los físicos, aquí incluimos terapias o técnicas como la presoterapia, andulación, magnetoterapia, técnicas de relajación, hidroterapia, termoterapia…
Andulación y dolor
La terapia de Andulación ofrece unos excelentes resultados en el tratamiento del dolor. Gracias a su efecto estimulante sobre la circulación y el metabolismo, el aporte de oxígeno y nutrientes a las células mejora notablemente, como también lo hacen la separación de sustancias nocivas y productos finales del metabolismo. Esto provoca un alivio considerable del dolor.
La terapia de Andulación ofrece al cuerpo un profundo estado de relajación, ya que el potencial de activación aumentado del sistema simpático, que va acompañado de dolores continuos, puede reducirse en un primer paso a algo a corto plazo y a continuación hacerlo de forma duradera.