El 1 de octubre se celebra el día internacional de las personas mayores, en estos últimos años, probablemente el grupo de edad al que más haya marcado la pandemia por todos los repuntes de contagio y aislamientos.
La unión Europea indica en el artículo 25 de la carta de derechos fundamentales de la UE que ‘’se reconoce y respeta el derecho de las personas mayores a llevar una vida digna e independiente y a participar en la vida social y cultural’’ al igual que la constitución española declara en el artículo 50 que las instituciones ‘’promoverán su bienestar mediante un sistema de servicios sociales que atenderán a sus problemas específicos de vivienda, salud, cultura y ocio’’.
Sus derechos son irrenunciables y no deberían pasarse por alto bajo ningún concepto. Desgraciadamente, todo parece apuntar que la pandemia ha hecho de ellos el blanco más fácil ya que ha tenido un alto impacto en la esperanza de vida del país.
¿Qué es el envejecimiento?
El envejecimiento se define como el conjunto de transformaciones físicas, metabólicas, mentales y funcionales que se producen con el paso de los años. A esto se suma la disminución de capacidad de adaptación a los cambios del entorno y, todo junto, nos lleva a un aumento de vulnerabilidad, fragilidad y un aumento del riesgo de enfermedad que finalmente nos acompaña a la muerte.
Todos esos cambios no siguen un patrón específico y su relación con la edad es relativa.
Además de todos los cambios a nivel biológico, envejecer también se asocia a otras transiciones de la vida como la jubilación, la necesidad de adaptar en algunos casos la vivienda o el entorno y encuentros de seres preciados con la muerte.
Por ello, será importante no solo adaptarse a los cambios y/o carencias sino también reforzar la recuperación, adaptación y el crecimiento psicosocial.
Aunque no hay una edad determinada que marque el inicio de la vejez, normalmente, los 65, o inicio de la jubilación suele considerarse como tal por todos los cambios que produce el cese de la actividad laboral.
Podemos tener en cuenta 3 edades o segmentos:
Edad cronológica: Tiene en cuenta el paso del tiempo, nos puede ayudar a predecir ciertos problemas de salud puesto que la probabilidad de desarrollar un problema de salud aumenta con el paso de los años.
Edad biológica: Tiene en cuenta las modificaciones que sufre el organismo con el paso de los años, en este caso, va estrechamente relacionada con los estilos de vida, hábitos de salud y ciertos efectos de algunas enfermedades en nuestro cuerpo.
Edad psicológica: Se refiere a cómo se comportan y sientes las personas, cómo se desarrollan con el entorno con el paso de los años.
Afecciones más comunes asociadas al envejecimiento
Entre las patologías que se relacionan con la vejez las más comunes serían la pérdida de audición, cataratas, dolores generalizados, artrosis, neumonías obstructivas, diabetes y demencia, patologías que además pueden ir en aumento conforme se envejece.
La vejez se caracteriza también por la aparición de varios estados de salud complejos que suelen ser consecuencia de múltiples factores que incluyen la fragilidad, incontinencia urinaria, caídas, úlceras…
Para evitar que algunas de estas patologías puedan sumarse a otras que ya se padecen, será de gran importancia mantener ciertos hábitos saludables a lo largo de la vida, el mantenimiento de la masa muscular mediante una buena nutrición y realizando un mínimo de actividad física diaria nos ayudará a mantener la función cognitiva, retrasar la dependencia y revertir la fragilidad.
Envejecimiento saludable
Denominamos envejecimiento saludable al aplazamiento o disminución de los efectos no deseados del envejecimiento, para esto, será imprescindible tal como hemos comentado en el punto anterior, mantener tanto la salud física como la mental, evitar los trastornos y mantenerse activo e independiente. Todo esto, supondrá más esfuerzo con el paso de los años.
- Sigue una dieta equilibrada y nutritiva.
- Realiza un mínimo de actividad física con regularidad.
- Mantente mentalmente activo.
Cuanto antes se desarrollen estos hábitos mejor, nunca es tarde para empezar y cuanto antes empecemos mejor.
Andulación y envejecimiento
La Andulación puede ser una gran aliada para hacer más llevadero, retrasar los efectos negativos del envejecimiento y aportar una sensación de bienestar gracias a los 5 principios biofísicos con los que actúa.
Gracias a la producción de energía celular se estimula la producción de ATP que aumenta la cantidad de energía celular y afectará positivamente a nuestro organismo y mejorará nuestra salud.
Además de esto, la Andulación permite una substitución neurofisiológica de los estímulos dolorosos generando estímulos positivos en nuestro cuerpo. Gracias a esta superposición de estímulos positivos frente a los dolorosos, el cerebro recibe señales cada vez más positivas que alivian el dolor, si se aplica el tratamiento de forma regular, el cuerpo liberará endorfinas, que son un antiinflamatorio natural para nuestro cuerpo.
También la estimulación de la circulación sanguínea nos ayudará a prevenir muchas dolencias que se ven agravadas por una mala circulaciones ya que, si nuestro cuerpo no recibe correctamente los nutrientes necesarios, nos veremos más fatigados y con mayor posibilidad de contraer ciertas enfermedades. Gracias a la Andulación la sangre se vuelve más fluida y activa el flujo circulatorio, por lo tanto, todo el organismo recibirá correctamente todos los nutrientes necesarios para su buen funcionamiento.
Una estimulación del sistema linfático, será el perfecto complemento de la activación circulatoria de la que acabamos de comentar puesto que, una correcta eliminación de los residuos metabólicos será clave para tener un sistema inmunológico fuerte y sano para prevenir posibles patologías.
Y finalmente, sumado a todo lo anterior, aumentará nuestra capacidad de relajación no solo física sino también mental.
Envejecer no es una enfermedad, sino un cambio inseparable de la vida que podemos tratar de hacerlo lo más llevadero posible.