El drenaje linfático es una de las técnicas más utilizadas en el tratamiento de la retención de líquidos ya sea con el fin de mejorar el retorno linfático como para su reabsorción. Esta técnica se puede llevar a cabo de forma manual o utilizando un dispositivo de presoterapia consiguiendo reducir en gran parte las molestias que proceden de la insuficiencia venosa y linfática y disminuyendo los riesgos de padecer edemas de importancia o otras patologías crónicas.
¿Qué es la retención de líquidos?
Edema es el término médico con el cual nos referimos a la acumulación excesiva de líquido bajo la piel. Las zonas más afectadas suelen ser las piernas y los pies, aunque también puede darse en párpados, cara y manos o de una forma generalizada.
Dentro de nuestro organismo, el agua está distribuida en diferentes compartimentos, se almacena en el plasma, y dentro y fuera de las células. Cuando el equilibrio existente entre el agua del interior y exterior de las células se rompe aumenta la cantidad de líquido extracelular y se produce la retención de líquidos formando los edemas.
Se denomina edema a las zonas donde se ha producido la retención de líquidos. Esta zona a menudo no solo se presenta hinchada, sino que a menudo, la piel suele estar más tensa y brillante. Al presionar con el dedo podremos notar como se queda marcada la huella sobre la piel y desaparece de forma progresiva. La retención de líquidos se acompaña además de una excesiva retención de sodio y agua en los riñones y por ello, aunque no se considera una patología por sí misma, puede ser síntoma de una gran variedad de patologías que pueden llegar a ser graves.
Existen diversas causas que pueden causar retención de líquidos, entre las causas benignas, una de las más frecuentes a descartar es la ingesta de determinados fármacos y las mujeres durante la gestación o en fase premenstrual también suelen retener líquidos a causa de los cambios hormonales.
Por otro lado, existen casos en los que la causa del edema sí que es grave y habrá que actuar lo más rápido posible. Las causas más comunes son la insuficiencia cardíaca, la cirrosis hepática, el hipotiroidismo, el síndrome nefrótico y la insuficiencia renal. En cualquiera de estas situaciones deberá dirigirse al médico o a su especialista para iniciar el tratamiento adecuado.
Otras causas que pueden provocar retención de líquidos y que podemos evitar son:
• Malos hábitos alimentarios
• Hidratación insuficiente
• Sedentarismo
¿Qué es el drenaje linfático?
El drenaje linfático es una técnica que se aplica sobre el sistema circulatorio y linfático con la finalidad de movilizar los fluídos del organismo para así favorecer la eliminación de substancias residuales que se acumulan en el líquido que hay entre los espacios celulares causando hinchazón, pesdez, fóveas e incluso dolor en algunos casos. El drenaje linfático se puede realizar de forma manual dónde el especialista masajeará la zona a tratar de forma localizada o mediante algún dispositivo de presoterapia. La combinación de ambas en la mayoría de los casos, suele ser lo más efectivo.
Aunque la principal aplicación del drenaje linfático sea tratar la retención de líquidos, también es una técnica efectiva en el tratamiento de la celulitis, piernas cansadas, problemas circulatorios, procesos de cicatrización…
Entre sus beneficios más notables cabe destacar:
- Ayuda a reabsorber los líquidos.
- Efecto sedante en el dolor.
- Reduce la inflamación.
- Mejora las defensas del organismo.
- Efecto de relajación de los tejidos.
Prevención para evitar la retención de líquidos
En otra entrada del blog comentamos los síntomas de la pesadez de las piernas que en muchos casos van acompañadas de retención de líquidos, podéis acceder a esa entrada aquí para consultar si en vuestro caso esa es la zona que se ve afectada. A continuación os facilitamos algunos otros consejos generales para su prevención:
- Reducir la ingesta de sodio, reduciendo el consumo de alimentos ricos en sal.
- Aumenta la ingesta de alimentos ricos en potasio, consumiendo una dieta rica en frutas y verduras. El aumento de la ingesta de potasio disminuye la tensión arterial en adultos.
- Hidratarse correctamente para evitar un desbalance hídrico en el organismo. Se debe beber en torno a 2,3 litros de agua al día.
- Evitar el sedentarismo. Optar por un estilo de vida saludable, realizando actividad física de manera regular.
- Mantener las piernas elevadas por encima del corazón.
- Evitar estar sentados durante periodos de tiempo muy largos.
Tratamiento de los edemas
El tratamiento de los edemas si son leves suele ser innecesario puesto que suele desaparecer por sí solo si mantenemos las piernas por encima de la altura del corazón. En casos más graves o severos, es posible que su doctor le prescriba algunos medicamentos diuréticos con la finalidad de ayudar al cuerpo a expulsar el exceso hídrico a través de la orina. Será además necesario tratar la causa de la retención para obtener resultados a largo plazo.
Existen además ciertas medidas que también pueden ayudar a disminuir el edema y evitar que vuelva a aparecer, aunque desde aquí vamos a nombrar algunas de ellas, será importante comentar su caso concreto con su especialista para que le pueda indicar la opción más adecuada a su historial médico.
Movimiento: Mover y usar los músculos de la parte del cuerpo afectada por el edema puede facilitar el bombeo para el retorno de exceso de líquido.
Elevación: Mantener la parte inflamada elevada por encima del corazón facilitará su retorno y evitará la acumulación de líquido.
Drenaje linfático manual: Masajear enérgicamente la zona afectada hacia el corazón puede ayudar a reabsorber el exceso.
Compresión: Se utilizan una vez controlada la inflamación de la zona a tratar para evitar que se vuelva a acumular líquido en la zona.
Protección: Evitar las lesiones en la zona para así impedir que nos veamos afectados por inflamaciones externas.
Presoterapia: Masaje mediante compresión pneumática para favorecer el retorno de la linfa para su correcta reabsorción de líquido y sustancias tóxicas extravasadas.
¿Qué es la presoterapia?
La presoterapia es una técnica indicada para un buen drenaje linfático y otras afecciones del sistema circulatorio como las piernas cansadas, arañas vasculares, edemas, celulitis…
Para ello, se utilizan unos accesorios pneumáticos (perneras, faja…) con un determinado número de cámaras de aire que distribuyen distintos niveles de presión a lo largo de las zonas afectadas. No solo se trata de una técnica sencilla de utilizar sino que además no es dolorosa, es eficaz y ofrece buenos resultados desde la primera sesión.
Su funcionamiento consiste en una aplicación de aire controlada y de forma ascendente que proporcionará el impulso necesario para que haya un buen retorno venoso al corazón.
Cada sesión tiene una duración aproximada de entre 30min o 1h y en ese tiempo se logra una sensación de masaje con efectos de relajación y compresión suficientes para activar el sistema linfático y, con ello, la eliminación de líquidos, de toxinas, edemas, linfoedemas y trastornos venosos más conocidos como varices.
Presoterapia UTS
En iXalud apostamos por la presoterapia y el dispositivo UTS, con los programas de drenaje más efectivos ya preestablecidos por defecto y tan sencillo de utilizar que se puede manejar a nivel usuario. Cuenta con distintos accesorios que el dispositivo detecta de forma automática y las sesiones son programables desde 15min pudiendo hacer un tratamiento más personalizado, localizado o según necesidad.